El pomo o tirador de la puerta es la tarjeta de presentación de cualquier espacio. En ocasiones, el uso diario puede provocar cierto deterioro a través de los años, por lo que un par de trucos de mantenimiento pueden conseguir que permanezcan como nuevos durante un tiempo más prolongado.
Elección adecuada
En muchas ocasiones escogemos el producto inadecuado para limpiar los pomos de las puerta o los tiradores de los muebles. Esto hace que pierdan su belleza original al eliminar el brillo con productos abrasivos. Los productos que destinemos para este fin deben ser específicos para la limpieza de pomos de puertas, que varían según el material con el que estén fabricados.
Productos
El amoníaco es uno de los mejores aliados. Es importante mezclarlo con agua a partes iguales para evitar deteriorar el material, así como cualquier posible contaminación por contacto. No obstante, una solución sencilla y efectiva es el uso de detergente, agua y un trapo limpio. Para hacer relucir su brillo podemos usar un cepillo especial para ello.
No recomendable
Lo más importante a tener en cuenta es el material con el que estén hechos los pomos. Los limpiametales tradicionales son una opción ineficaz, ya que pueden deteriorar el material y disminuir su tiempo de vida.